ALERTA ROJA | Fallecimiento bajo custodia y denuncias de maltrato colocan en la mira al Centro de Detención Provisional de Haina
Santo Domingo, R.D. – La muerte bajo custodia de la ciudadana estadounidense Ellen Hulett, en el Centro de Detención Provisional de Haina, ha encendido las alarmas sobre las graves y persistentes violaciones a los derechos humanos que allí se registran. El caso plantea serias interrogantes sobre el trato que reciben las personas privadas de libertad en este recinto, que opera como centro de detención migratoria y retención provisional de nacionales repatriados.
El Observatorio de Derechos Humanos para Grupos Vulnerabilizados (ODHGV), a través de su coordinador general, Manuel Meccariello, emitió este jueves una alerta roja ante el cúmulo de denuncias sobre maltratos, condiciones infrahumanas y negligencia institucional dentro del centro.
“Nos llegan de manera constante testimonios desgarradores de personas recluidas en Haina. Lo más alarmante es que muchas de ellas enfrentan barreras idiomáticas sin recibir ningún tipo de asistencia. Este lugar se ha convertido en una trampa de sufrimiento para seres humanos en espera de medidas de coerción, muchos pertenecientes a poblaciones altamente vulnerables”, denunció Meccariello.
Aunque las autoridades han informado sobre remozamientos y mejoras superficiales, las condiciones estructurales y humanas del recinto continúan siendo precarias. “Ni siquiera se puede realizar con éxito una llamada telefónica. Estamos ante una falla institucional sistemática que amenaza la vida y la dignidad de las personas detenidas”, agregó.
Ante esta situación, el ODHGV hace un llamado urgente a:
· La Procuraduría General de la República, para que ordene una investigación independiente y profunda sobre las circunstancias de la muerte de Ellen Hulett y otros posibles casos de abuso o negligencia.
· El Defensor del Pueblo, para que realice visitas semanales al centro, con el fin de verificar las condiciones de detención y garantizar la protección de los derechos fundamentales.
· Organismos nacionales e internacionales, como la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y el Mecanismo Nacional de Prevención contra la Tortura, para que lleven a cabo inspecciones inmediatas y sistemáticas.
El Observatorio también solicita autorización para ingresar al Centro de Detención de Haina, no solo con el objetivo de constatar directamente las condiciones reales y emitir recomendaciones, sino además para brindar capacitaciones en derechos humanos con enfoque en grupos vulnerados al personal que labora en el recinto. Esta formación sería un aporte concreto del Observatorio para promover prácticas institucionales más humanas, seguras y respetuosas de la dignidad de todas las personas.
“Es una obligación legal y moral del Estado garantizar condiciones dignas a toda persona bajo custodia. No hacerlo equivale a institucionalizar el maltrato y la crueldad”, advirtió Meccariello.
Finalmente, el Observatorio hace un llamado a la ciudadanía: cualquier persona que tenga conocimiento de situaciones de abuso, negligencia o maltrato en el Centro de Detención de Haina, puede comunicarse de manera confidencial con nuestra Línea de Auxilio al 809-200-0286, disponible para recibir denuncias y brindar orientación.
Santo Domingo, R.D. – La muerte bajo custodia de la ciudadana estadounidense Ellen Hulett, en el Centro de Detención Provisional de Haina, ha encendido las alarmas sobre las graves y persistentes violaciones a los derechos humanos que allí se registran. El caso plantea serias interrogantes sobre el trato que reciben las personas privadas de libertad en este recinto, que opera como centro de detención migratoria y retención provisional de nacionales repatriados.
El Observatorio de Derechos Humanos para Grupos Vulnerabilizados (ODHGV), a través de su coordinador general, Manuel Meccariello, emitió este jueves una alerta roja ante el cúmulo de denuncias sobre maltratos, condiciones infrahumanas y negligencia institucional dentro del centro.
“Nos llegan de manera constante testimonios desgarradores de personas recluidas en Haina. Lo más alarmante es que muchas de ellas enfrentan barreras idiomáticas sin recibir ningún tipo de asistencia. Este lugar se ha convertido en una trampa de sufrimiento para seres humanos en espera de medidas de coerción, muchos pertenecientes a poblaciones altamente vulnerables”, denunció Meccariello.
Aunque las autoridades han informado sobre remozamientos y mejoras superficiales, las condiciones estructurales y humanas del recinto continúan siendo precarias. “Ni siquiera se puede realizar con éxito una llamada telefónica. Estamos ante una falla institucional sistemática que amenaza la vida y la dignidad de las personas detenidas”, agregó.
Ante esta situación, el ODHGV hace un llamado urgente a:
· La Procuraduría General de la República, para que ordene una investigación independiente y profunda sobre las circunstancias de la muerte de Ellen Hulett y otros posibles casos de abuso o negligencia.
· El Defensor del Pueblo, para que realice visitas semanales al centro, con el fin de verificar las condiciones de detención y garantizar la protección de los derechos fundamentales.
· Organismos nacionales e internacionales, como la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y el Mecanismo Nacional de Prevención contra la Tortura, para que lleven a cabo inspecciones inmediatas y sistemáticas.
El Observatorio también solicita autorización para ingresar al Centro de Detención de Haina, no solo con el objetivo de constatar directamente las condiciones reales y emitir recomendaciones, sino además para brindar capacitaciones en derechos humanos con enfoque en grupos vulnerados al personal que labora en el recinto. Esta formación sería un aporte concreto del Observatorio para promover prácticas institucionales más humanas, seguras y respetuosas de la dignidad de todas las personas.
“Es una obligación legal y moral del Estado garantizar condiciones dignas a toda persona bajo custodia. No hacerlo equivale a institucionalizar el maltrato y la crueldad”, advirtió Meccariello.
Finalmente, el Observatorio hace un llamado a la ciudadanía: cualquier persona que tenga conocimiento de situaciones de abuso, negligencia o maltrato en el Centro de Detención de Haina, puede comunicarse de manera confidencial con nuestra Línea de Auxilio al 809-200-0286, disponible para recibir denuncias y brindar orientación.