En un preocupante suceso ocurrido en la calle Doble Vía de Verón, aproximadamente 130 apartamentos han sido objeto de un desalojo forzado. Los inquilinos, quienes han residido en el lugar durante años, se encontraron con la llegada de la policía, que procedió a desalojarlos de manera agresiva y sin previo aviso.
Según informes, el propietario del edificio contaba con una notificación de desalojo, pero nunca la comunicó a los inquilinos. Esto ha generado una ola de indignación y confusión entre los afectados, quienes se vieron obligados a sacar sus pertenencias a la calle, donde se quedaron expuestas y desprotegidas.
Los testimonios de los inquilinos relatan una situación caótica, donde la falta de comunicación y el uso desmedido de la fuerza por parte de las autoridades han dejado a muchas familias en la incertidumbre y la vulnerabilidad.
Frente a este alarmante escenario, hacemos un llamado a las autoridades competentes para que tomen cartas en el asunto y se investigue el proceder del propietario y de la policía en este desalojo. La falta de notificación adecuada y el tratamiento agresivo hacia los inquilinos son violaciones a sus derechos que no deben ser ignoradas.
Este incidente pone de manifiesto la necesidad de una mayor regulación en los procesos de desalojo y protección a los inquilinos, garantizando que se respeten sus derechos y se eviten situaciones como esta en el futuro. La comunidad exige respuestas y soluciones inmediatas para los afectados, quienes merecen vivir en un entorno de dignidad y respeto.
Reportaje exclusiva: Gabriel Márquez Veriguete