La reforma a la Ley de Amparo con la que la presidenta, Claudia Sheinbaum, busca apretar a los grandes deudores fiscales ha culminado con éxito su trayecto por el Legislativo. El Senado ha aprobado este miércoles la iniciativa presidencial por la vía rápida, sin pasar por las comisiones, después de que la Cámara Baja diera su visto bueno la madrugada del miércoles. La norma sale adelante con 81 votos a favor y 37 en contra, gracias a la aplanadora morenista y sus aliados parlamentarios, el Partido Verde y el del Trabajo. La oposición denuncia el debilitamiento de una figura que había convocado el orgullo nacional desde que comenzó a implementarse, hace más de una década. Los expertos han conseguido arañar algunos cambios que suavizan los aspectos más puntiagudos del proyecto, pero la sensación fuera del oficialismo es que el afán recaudatorio de la medida ha trastocado la herramienta clave con la que los ciudadanos combaten los abusos de las autoridades.
