Alemania endurecerá su política migratoria para “reducir eficazmente” el número de extranjeros sin papeles, según han pactado este sábado democristianos y socialdemócratas en Berlín. El preacuerdo, que también incluye inversiones masivas en defensa e infraestructuras, cierra con éxito las llamadas “conversaciones exploratorias” entre las integrantes del futuro Gobierno alemán. En las próximas semanas, la Unión Democristiana (CDU) y su partido hermano bávaro, Unión Socialcristiana (CSU), negociarán con el Partido Socialdemócrata (SPD) el detalle del “contrato de coalición” que debe permitir, a mediados de abril, investir canciller federal al conservador Friedrich Merz.