Decenas de personas, en su mayoría jóvenes, se concentraron este domingo en la Plaza de la Bandera para exigir justicia por la muerte del niño Donelly Martínez y que se modifique la Ley 90- 19 de Antirruidos.
Yadira Marte, del movimiento Toy Cansao, explicó que esta ley está diseñada para extorsionar, ya que no especifica los decibeles permitidos ni la cantidad de bocinas.
De acuerdo con la activista, esta ley perjudica a jóvenes que viven de la música, pues pagan impuestos para ingresar los equipos de música al país y luego tienen que pagar multas de hasta 500 mil pesos.
«La ley es arbitraria. Si los muchachos tienen las bocinas apagadas en los carros los policías se las llevan y para recuperar esas bocinas que valen 500 mil, un millón, hay que pagar una multa de 50 mil, 150 mil y hasta 500 mil pesos», dijo.
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Por esta situación, explicó que están demandando la destitución de la viceministra de Seguridad Preventiva, Ángela Jáquez.
Además, los movimientos demandaron justicia por la muerte del niño Donelly Martínez, quien falleció a consecuencia de dos disparos que recibió luego de que un raso de la Policía Nacional tuvo un altercado con su padre en la celebración del carnaval de Santiago.
En ese sentido el pastor Kelvin Ramírez pidió que el policía que disparó sea condenado.
