El juez federal de distrito James E. Boasberg, de Washington, ordenó el sábado por la noche el bloqueo temporal de una ley del siglo XVIII diseñada para los tiempos de guerra que la Administración de Donald Trump había desempolvado para poder expulsar a miembros de la banda criminal venezolana Tren de Aragua, sin necesidad de la intervención de una autoridad judicial. En la vista en la que el magistrado decidió que Washington no tenía derecho a esas deportaciones, ordenó también que los dos aviones que en ese momento estaban en el aire cargando inmigrantes inmigrantes para expulsarlos del país dieran media vuelta y volvieran a territorio estadounidense. Este domingo, un funcionario del Gobierno confirmó que una de las dos aeronaves llegó a El Salvador, cargada con cientos de personas, pese al dictamen del juez. El otro iba rumbo a Honduras.