El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva. Fuente externa.
EL NUEVO DIARIO, RÍO DE JANEIRO.- El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, afirmó este sábado que está «100 % curado de la cabeza» tras someterse a nueva batería de exámenes médicos para ver la evolución de la hemorragia intracraneal por la que tuvo que pasar por el quirófano en diciembre.
«Lulinha está 100 % curado de la cabeza. Cabeza nueva y limpia», aseguró el líder progresista en un acto en la ciudad de Río de Janeiro por el 45 aniversario del Partido de los Trabajadores (PT), que el propio Lula dirige desde su fundación.
El mandatario de 79 años reconoció que pasó «el momento más delicado de su vida», cuando se le detectó una hemorragia intracraneal como consecuencia de una fuerte caída que sufrió en octubre pasado en el baño de su casa y en la que se golpeó la nuca.
«Los médicos me dijeron que podría haber entrado en coma, que podría haber muerto», relató.
Lula fue operado de urgencia en São Paulo para drenar la hemorragia detectada en su cabeza y estuvo varios días recuperándose en la unidad de cuidados intensivos, aunque no le quedó ninguna secuela neurológica, según su equipo médico.
Este sábado, dijo que las nuevas pruebas médicas realizadas esta semana muestran que está completamente curado.
«Creo que es muy difícil que un joven de 40 años tenga la salud que tengo yo ahora» y «quiero decir a todos aquellos que dicen que pueden destruir al PT que estoy más vivo y más fuerte que nunca», avisó Lula, vestido con una camisa roja.
A la ceremonia de este sábado acudió una nutrida delegación de ministros de su Gobierno, gobernadores y parlamentarios del PT, algunos de los cuales animaron a Lula a presentarse a la reelección en 2026.
No obstante, Lula dijo la semana pasada, en una entrevista a una radio local, que se presentará a la reelección dentro de dos años, si está al «100 % de salud» y «con la misma energía» que tiene ahora.
El jefe de Estado señaló entonces que esa no es su «prioridad ahora» y al mismo tiempo subrayó que debe «ser consciente» de su edad avanzada y, por lo tanto, «no puede mentir a nadie» y «mucho menos» mentirse a sí mismo.