La información ha aparecido en The Washington Post años después de que este mismo periódico ganara un premio Pulitzer por promover la narrativa de la supuesta “intervención de Moscú”, con la que los demócratas intentaron justificar su fracaso electoral.
Un estudio confirma que la “injerencia rusa” en los comicios de 2016 en EE.UU. fue una farsa
